This article was originally published in The Notebook. In August 2020, The Notebook became Chalkbeat Philadelphia.
El plan de vales de matrícula que posiblemente se tenga en Pensilvania está ahora en el Comité de Educación de la Cámara de Representantes, ya que fue aprobado por el Senado (voto 27-20) el 26 de octubre. La Cámara no ha aprobado planes de vales en el pasado, pero no se sabe cuál será el resultado para la versión presentada este año.
El plan incluye una fase introductoria de tres años. El primer año los vales beneficiarían a cualquier estudiante de bajos ingresos matriculado en una escuela que esté fracasando persistentemente. El segundo año, sería elegible cualquier estudiante de bajos ingresos que asista a una escuela privada pero vive en un distrito cuya escuela está fracasando persistentemente. Después, todos los estudiantes de bajos ingresos serían elegibles sin importar cuán bueno sea el desempeño de la escuela de su comunidad.
Los niños de familias con ingresos de menos de $29,000 anuales serían elegibles para recibir un vale completo equivalente al subsidio estatal por niño para su distrito local. Los estudiantes de familias que ganen menos de $41,000 recibirían un vale equivalente a 75% del subsidio. En promedio, una familia recibiría $7,700 por cada estudiante.
En el primer año, se definirá que una escuela está fracasando si está en el 5% de desempeño más bajo entre las escuelas de todo el estado en base a las puntuaciones del PSSA – 143 escuelas, incluyendo 88 en Filadelfia. Unos 70,000 estudiantes serían elegibles el próximo año, aunque las proyecciones sugieren que sólo 5-10% de los padres los usarán.
Una nota fiscal preparada por los Republicanos en el Senado calcula que el costo del plan será $43 millones en el 2012-13 y más o menos el doble de esa cantidad – $81 millones – el año después. Las proyecciones publicadas por la Asociación de Juntas Escolares de Pensilvania, que se opone a los vales, son mucho más altas: $52 millones el primer año y tan alto como $252 millones el segundo.